PROTECCIÓN SOLAR CORPORAL

Ambas protegen frente a los rayos UV, pero están pensadas para necesidades distintas. La protección solar corporal se aplica sobre zonas más amplias, suele tener texturas más resistentes y busca practicidad y duración. La facial, en cambio, se adapta a la delicadeza del rostro: ofrece acabados más ligeros, activos específicos y fórmulas que también pueden incluir tratamiento para afecciones cutáneas.

La diferencia entre un protector solar mineral y un protector solar químico está en cómo actúan sobre tu piel:

• El protector solar mineral, también conocido como físico, utiliza filtros como el óxido de zinc o el dióxido de titanio. Se queda en la superficie de la piel y refleja los rayos UV, actuando como un escudo visible e inmediato. Además, es ideal para pieles sensibles o reactivas. 
• El protector solar químico contiene filtros como avobenzona u octinoxato, que absorben los rayos UV y los transforman en calor antes de que penetren en la piel. Gracias a eso, suelen tener texturas más ligeras, transparentes y agradables al tacto.

Tanto el protector solar mineral como el químico protegen eficazmente frente al sol. El primero refleja, el segundo absorbe. Uno actúa como escudo; el otro, como un gesto imperceptible. La elección es tuya: depende de tu piel, tu rutina y lo que prefieras sentir al protegerla.

En SECRETS seleccionamos fórmulas de protección solar corporal que combinan eficacia, sensorialidad y respeto por la piel. Trabajamos con marcas que destacan por su tolerancia dermatológica, texturas agradables y protección de amplio espectro, como: 

• SVR.

Todas han sido evaluadas por nuestro equipo por su composición, resultados y experiencia sensorial. Porque en SECRETS solo recomendamos lo que realmente marca la diferencia en tu piel, hoy, mañana y cada día bajo el sol.

No existe una fórmula única en protección solar, pero sí opciones que destacan por su eficacia, su tolerancia dermatológica y una sensorialidad que invita a reaplicar. Como estas:

SVR Sun Secure Eau Solaire SPF50+

Un protector solar en agua bifásica que combina frescura y alta protección. Su textura ultraligera se funde con la piel sin dejar residuo, y puede aplicarse incluso sobre piel mojada. Ideal para quienes buscan reaplicar con facilidad, sin renunciar a una experiencia sensorial placentera.

SVR Sun Secure Spray SPF50+

Un spray corporal que se desliza con suavidad, se absorbe al instante y desaparece sin dejar rastro. Su textura ligera y su acabado invisible lo convierten en el aliado perfecto para quienes buscan protección eficaz sin complicaciones, incluso en los días más intensos de sol.

En SECRETS entendemos que la piel del cuerpo merece cuidados diarios, no solo estacionales. Por eso, aquí encontrarás fórmulas seleccionadas por especialistas: protectores solares corporales que se adaptan a tu día real, con texturas que suman sin interrumpir. Descúbrelos y elige ese bloqueador solar que cuida tu piel bajo el sol y transforma la aplicación en un gesto natural de bienestar.

Elegir la mejor protección solar corporal no es solo cuestión de filtros. También influye cómo se siente al aplicarlo, cómo se integra a tu día y cómo se adapta a tu ritmo. Por eso hay texturas que funcionan mejor para ciertos momentos, climas o tipos de piel:

• Spray o bruma: práctico para reaplicar rápido y cubrir zonas amplias sin esfuerzo.
• Crema: ideal para pieles secas o exposiciones prolongadas, con una textura más envolvente.
• Gel: fresco y ligero, perfecto para climas cálidos o pieles mixtas que buscan confort sin peso.
• Aceite seco: acabado satinado sin sensación grasa, ideal para quienes buscan protección con un toque luminoso.

En resumen, no se trata de encontrar la textura perfecta, sino la que encaje contigo. La que acompañe tu piel, tus gestos y la forma en que vives el sol. Porque cuando el protector solar se siente bien, aplicarlo deja de ser una obligación y se convierte en ese gesto cotidiano que sí apetece repetir.

La protección solar corporal debe formar parte de tu rutina diaria siempre que tu piel esté expuesta al sol. Incluso si el día está nublado o no vas a la playa: la radiación UVA atraviesa nubes y cristales todo el año.

En cuanto a la aplicación, lo ideal es usar protector solar por la mañana, como último paso de tu rutina bodycare, al menos 15 minutos antes de salir, y reaplicarlo cada dos horas si estás al aire libre o después de nadar, sudar o secarte con toalla.